Ahora que ya no estás

El dolor nos hace fuertes, cuando pierdes a alguien te das cuenta de lo corta que es la vida,... se te pasa toda la tuya por delante.

Te das cuenta de que la familia es lo más importante, le das relevancia a cosas que antes no se las dabas. Todo lo que te ha pasado anteriormente te hace ver que todo ha sido una tontería, que sufrías por cosas por las que no tenías que hacerlo, por tanto, ahí va:

"Desde que nací, tú has estado a mi lado, me has criado,... mientras los demás niños estaban en la guardería, yo me pasaba el día entero contigo, me llevaste al colegio en mi primer día, me recogías, y no ganaste para el disgusto cuando me cortaron el pelo en clase con cuatro años.

Me has enseñado a dar importancia a las cosas pequeñas, a ayudar a quien lo necesita,  ser educada, responsable, a apreciar lo que tengo.
Tú has sido mi mayor ejemplo y ahora que no estás, esto perdida...

Eras la única persona en la que confiaba, en la que sentía que podía contarle todo, el hombro en el que llorar, porque he sido quien ha estado contigo más tiempo estos dieciocho años, que te devolví la vid cuando  más lo necesitabas, y ahora siento que t´te has llevado la mía.

Echo de menos tu olor, tu voz, tu tacto, el pasar las noches contigo, cuando me contabas historias de cuando eras joven, los paseos, el caerme y que vinieses corriendo preocupada a hacerme el sana,sana...

Eras tan dulce, y tan buena conmigo,... que ahora echo de menos todo ese amor, porque eras la única que me lo daba cuando lo necesitaba de verdad.

Ahora lo necesito más que nunca y te has ido.

Siempre pensé, que cuando te fueses, me moriría, y la verdad es que ha sido así, intento estar bien, estar normal, pensar que mi vida sigue, y aunque mi cuerpo esté presente, por dentro estoy muerta,... miro hacia delante y no consigo ver nada positivo, y ahora que me faltas, menos...

Intento hacer todo lo posible para que te sientas orgullosa de mí.


Gracias por todos estos años que me has dado de felicidad y cariño, gracias abuela, por todo lo que me has dado y todo lo que me has enseñado, no volveré a ser la misma sin tenerte a mi lado..."

Juana Antonina Rodríguez Martín.

Vivo en una nube

Quererte es poco, amor.
Tenerte lejos es lo que me hace quererte más, que te vea una vez cada mucho es lo que me hace seguir adelante, porque el tiempo que estoy sin ti, lucho por volver a verte.

Me da miedo tenerte tan lejos, porque el tiempo que pasamos juntos fue maravilloso, pero me destroza por dentro pensar que solo se quedará ahí, que hagas tu vida con otra persona que no sea yo.

Ahora mismo estoy como en una nube, todo me recuerda a ti,... pase por donde pase se me viene tu olor y te busco con la mirada, oigo tu voz por todas partes y no te encuentro, sinceramente, más que una nube, es un tormento.

No puedo evitar escuchar cualquier canción y no acordarme de ti; no mirar el agua y ver hojas imaginarias caer en ella; no oir una cascada que solo retumba en mi cabeza,... todo, que hace que cierre los ojos y vuele hacia allí.

Si piensas que no me importas no tienes razón, porque estoy aquí sentada, escribiendo esto para la persona que me ha cambiado de un día para otro,... para que sepas lo mucho que te extraño, lo importante que eres en mi vida, y lo mucho que deseo tenerte a mi lado cada día, amor.

Cuando

No entiendo a esas personas que cambian de la noche la mañana, ¿cuándo ha pasado esto? Culpa mía no puede ser, porque yo lo único que he hecho es entregarte mi corazón, ofrecertelo envuelto con mi confianza, con mi cariño y con todo el amor que podía darte.
Aún no entiendo para qué, porque lo has tratado como si fuese la típica lata que te encuentras tirada por la calle a la cual le das patadas hasta que se desvía lo suficiente como para no ir a por ella.

Mucho no he podido hacer, como te dije, iba a estar para todo lo que necesitases, apoyo, cariño, ánimo; pero no lo quieres, lo rechazas.
No se puede amar sin ser amado.

Ha ocurrido todo tan deprisa... Hace nada, estábamos paseando por la calle agarrados de la mano, besándonos en los bancos de los parques y abrazándonos en cada esquina, y ahora ni quieres verme, pasas por al lado de mi casa y no quieres pasar a buscarme...
¿Cuándo ha ocurrido esto? ¿Cuándo ha sucedido todo tan deprisa? ¿Por qué me he perdido lo mejor de la relación?

Me he cansado de dar todo, de darte todo de mí, y que tú aún no sepas lo que quieres. Pero al parecer, lo que quieres no soy yo.

Quiero que me quieras

Seguimos en las mismas. Al parecer mis errores del pasado tiene que afectar a mi presente, y no entiendes que no soy así, ya no.

Que te quiero y te lo demuestro, que no lo he hecho una vez, ni dos, sino que intento demostrártelo cada día, cada vez que puedo, pero no me dejas.

Parece que no quieres estar conmigo, que quieres que esto se acabe ya, y no ha hecho más que empezar... De hecho, ni ha empezado aún.

No puedo estar así todos los días, no puedo estar con cuidado de que no te moleste algo, no puedo estar siempre pendiente de todo, y quiero que me quieras por lo que soy ahora y no por lo que quieres que sea...
Tienes que entender, que tú lo eres todo para mí ahora, que poco a poco, cada día, has hecho que te coja cariño, y que con tu dulcura, has hecho que me de miedo hacerte daño, de lo que no soy capaz.

No sé si ayer derramé pocas lágrimas o no sé,... pero no quiero estar así todos los días. Quiero que me quieras como yo te quiero a ti, y si puede ser más, mejor. Cosa imposible.

Desahogo

Cuando estoy contigo siento que no hay nada mejor, que lo único que quiero es eso, porque a tu lado soy feliz... Tú me haces feliz; me haces sonreír y que piense que solo estás tú; y que la razón de mi existencia,... eres tú.

En cambio, cuando estoy sin ti, el cielo es negro, los árboles marchitos, el agua de color verde, y mi corazón naranja.
Necesito estar contigo y no puedo, y al no poder, me enfado, y hago que te enfades. Entonces discutimos.
Y es aquí cuando me empieza a costar respirar, cuando se me empiezan a empañar lo ojos y comienzo a llorar, por no tenerte cerca, por necesitar un abrazo y un beso de tus labios...

Entonces es cuando temo que hagas una tontería; cuando me cuestiono si hicimos bien en estar juntos, porque hagas lo que hagas ahora me va a importar el doble, y me va a doler el triple multiplicado por veintitrés.

Me vuelvo insoportable, y dudo que tú lo aguantes...