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viernes, 4 de marzo de 2011

Nunca sabes lo que tienes hasta que lo pierdes.

¡Já! Increíble. Vale que la hayas fastidiado más de una vez por la forma de ser que tengas... Pero, por favor.

¿Sabeis lo tontas que somos?
Nos dejan, y sí, en el último momento nos arrepentimos e intentamos arreglarlo, ¿y para qué? Para nada claro. ¿No hay un dicho que dice no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes? Pues ni con ese dicho lo arreglas. 

Te puedes arrastrar todo lo que quieras y llorar más que nunca que no va a servir de nada... Demostrar (aunque sea a última hora) lo mucho que quieres a esa persona para que te perdone y a partir de ese momento darle lo mejor de ti.
Pero no... Y te tienes que pasar días mal y llorando por alguien, un tío. ¿Por qué, si los tíos son tan cabrones, tenemos que llorar por ellos?

A pesar de lo mal que lo pasamos, no podemos vivir sin ellos... :(

 

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